En épocas de turbulencia, las oportunidades vienen prácticamente solas a tocar a nuestra puerta. Desde personas que nos contactan con nuevas propuestas, hasta precios regalados en la bolsa. Pero eso no significa que podamos aprovecharlas. Sólo podemos hacerlo si la oportunidad nos encuentra con dinero disponible. Lo curioso es que eso ocurre muy pocas veces y tiene una explicación.
Como usted ya sabe, la economía se va moviendo en ciclos. Hay períodos buenos y períodos malos. En los buenos, todas las inversiones suben de precio, tanto las de buena calidad, como las mediocres. No importa dónde hayamos decidido poner la plata… lo más probable es que recibamos siempre buenas noticias y lleguemos a sentirnos como “el rey del mercado”. Cuando eso pasa, pensamos que podríamos haber ganado más, si hubiéramos invertido más. Entonces empezamos a pensar en cómo apalancar las ganancias. Dejamos la prudencia de lado, invertimos aquello último que teníamos de reserva y hasta llegamos a invertir dinero prestado en cualquiera de sus formas: créditos personales, utilización de cuentas de márgenes, uso de derivados, etc. Nuestro espacio para maniobrar es “cero” pero confiamos en que mañana los precios seguirán subiendo y conseguiremos más de lo que habíamos imaginado.
Un día, los precios empiezan a caer sin que se escuchen muchas noticias negativas. Imaginemos que el motivo es la baja en el precio del petróleo, pero eso venía desde antes y no tiene ninguna relación con las inversiones que nosotros hicimos, así que nunca le dimos demasiada importancia. Al día siguiente los precios siguen bajando, pero esta vez, aparece un dato desalentador del empleo en Estados Unidos. ¿Que tiene que ver con el petróleo? Nada. Pero los inversores empiezan a poner especial foco en todas las noticias negativas. De golpe, una recesión en Estados Unidos, que hasta ayer parecía improbable, empieza a cobrar sentido y los mercados bajan con fuerza. Usted piensa: “Puedo esperar sin problema, esto es sólo volatilidad dentro de un mercado alcista”. Pero los precios siguen bajando y las noticias negativas no toman respiro.
Pasado algún tiempo, usted acumula una baja de un 25%, 40% o 50% en sus inversiones. Esto es en parte porque el apalancamiento que usó para acelerar la subida, le está jugando en contra cuando el mercado está en baja. Usted no puede entender cómo empresas con gran potencial pudieron bajar tanto hasta llegar a precios de “gangas”. En este punto, puede que se esté lamentando de haber usado crédito para apalancar sus inversiones, y está seguro (y hasta lo necesita) que el mercado volverá a los valores anteriores a la crisis. Habiendo bajado tanto, el único camino posible es hacia arriba.
Es entonces cuando se cruza con la noticia de que un conocido inversor acaba de comprar miles de acciones de una empresa X (empresa de muy buena calidad). Tiene sentido. Estaba extremadamente barata, era una excelente oportunidad. Es la misma empresa que le gusta a usted y este es el mejor momento para comprar. Usted lo sabe. Está seguro. Pero no puede aprovecharlo. No tiene dinero en efectivo. Usó todo lo suyo, y lo ajeno, para invertir cuando todo subía. Ahora tiene la sensación que los precios deberían volver con fuerza a la normalidad, pero por las dudas, reza para que lo hagan. Mientras tanto piensa: “que suerte que tuvo el inversor Y que tenía dinero justo cuando el mercado ofrecía ‘gangas’… a mí, la oportunidad se me presentó en un mal momento”. La frase “El dinero es el rey” (“Cash is king” en inglés), se acuñó para ilustrar este tipo de situaciones y empezó a ser usada desde el crash de 1987.
Justamente, la diferencia entre un inversor exitoso y otro que está en sus comienzos, se ve en la forma que domina este tipo de situaciones. La multitud suele asumir más riesgo cuando todo va bien, y se juega hasta lo que no tiene. Mientras tanto, empresas como Berkshire Hathaway, manejada por Warren Buffett, cuenta en la actualidad con más de USD 60.000 millones en efectivo para aprovechar las oportunidades que hoy toquen a su puerta. No es casualidad que Berkshire esté entre las 5 empresas más valiosas del mundo y que Buffett esté entre los 5 hombres más ricos del mundo invirtiendo en oportunidades que también están a su alcance.
Me gustaría saber si tienen un representante en México